“Todo debe revisarse y cambiar si es necesario”
En este estilo los padres están siempre al pendiente de sus decisiones,
cuestionándose si lo que están haciendo es lo correcto, si algo no funciona, no
dudan en tomar un camino alterno.
Cuando se aplica
equilibradamente:
Puede llevar a los hijos a tener un desarrollo bastante completo, ya que
sus padres siempre están observando y corrigiendo las reglas según las
necesidades que surjan. Se podría decir que este estilo, no es un estilo por sí
solo, sino que, es como tomar las partes buenas de todos los otros estilos, en
los momentos adecuados, y por lo tanto los beneficios pueden ser muy variados.
Cuando se lleva al
extremo se convierte en el modelo intermitente
La inconsistencia y la duda ante
todo, son las características de este modelo, los padres están tan preocupados
que, a la primera muestra de fracaso cambian de táctica, sin darse la
oportunidad de corroborar si es adecuada o no, es como quien cocina galletas,
pero después de unos minutos en el horno al ver que no se cocinan bien decide
desecharlas. Esta misma inconsistencia causa que no existan reglas fijas, ya
que siempre se están cuestionando y cambiando.
Mientras que los demás modelos pecan de rigidez al apegarse
obstinadamente a sus ideas, la rigidez de este modelo se presenta al haber un
cambio constante, es decir lo único que es seguro es que nada es seguro.
Este modelo les otorga a los hijos el control de la casa, ya que cuando
su comportamiento es reprobable, lo único que tienen que hacer mantenerse
firmes hasta que, más temprano que tarde sus padres terminen rindiéndose, o
utilizando un método que resulte conveniente a los hijos. A pesar de la
aparente posición de comodidad, los niños viven con bastante tención al no
tener seguridad sobre lo que pasara en su casa pues siempre está cambiando, lo
cual, en los casos más severos, puede desarrollar personas manipuladoras,
irresponsables e incluso trastornos de ansiedad.
Conclusión
El cambio es algo bastante bueno, pero si domina nuestras vidas, se
convierte en un caos en el cual no puede florecer nada positivo. La rigidez no
es buena, pero siempre es positivo mantenerse firmes y perseverar por un tiempo
antes de cambiar de estrategia.
Si gustas revisar los otros modelos para aprender un poco de ellos, aquí
está el link para el articulo principal. Y no olvides subscribirte a Facebook y
YouTube para recibir más trabajos así.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario